SIMÓN DE PINEDA y PEDRO ROLDÁN Retablo Mayor Hospital de la Caridad, Sevilla |
Pedro Roldán (1624-1699) nació en Sevilla, aunque su formación como artista la hizo en Granada, en el taller de Alonso de Mena, donde permaneció hasta el fallecimiento de su maestro en 1646. Ese año lo encontramos de vuelta en la ciudad del Guadalquivir, donde pronto empieza a relacionarse con los artistas más importantes de la ciudad, entre los que se encuentran los pintores Juan de Valdés Leal y Bartolomé Esteban Murillo, con los que va a colaborar en el desarrollo del curioso programa iconográfico que les encarga el caballero D. Miguel de Mañara para este hospital sevillano.
PEDRO ROLDÁN. Entierro de Cristo Hospital de la Caridad, Sevilla |
Mañara tuvo desde el principio muy claro el programa iconográfico que deseaba trasladar al interior del templo, y que se sustentaba en tres pilares. El primer mensaje lo encontramos a los pies de la iglesia, en los dos lienzos de Valdés Leal, In Icti Oculi y Fini Gloriae Mundi, que nos avisan de la fugacidad de la vida y de lo vano que resulta acumular riquezas o glorias en esta vida, en lugar de prepararnos para salvar el alma. A lo largo de la nave, diferentes pinturas de Murillo, de las que sólo queda in situ Santa Isabel de Hungría curando a los tiñosos, reflejaban cuáles eran los fines humanitarios de la Hermandad de atender y socorrer a los más desfavorecidos. Este camino que enseñaba a los hermanos cómo alcanzar el cielo culmina en el monumental retablo, trazado por Simón de Pineda, que preside el altar, sobre el que aparecen repartidas por sus calles diferentes figuras salidas de la mano de Roldán, como San Roque, santo protector de las enfermedades; San Jorge, el santo titular de la iglesia; en el ático las figuras de la Fe, la Esperanza y la Caridad, las tres virtudes teologales; y varias parejas de niños atlantes sosteniendo las columnas que separan las calles y que proporcionan unas gotas de dulzura al sobrecogedor conjunto.
PEDRO ROLDÁN. Entierro de Cristo (detalle). Hospital de la Caridad, Sevilla |
PEDRO ROLDÁN. Entierro de Cristo (detalle). Hospital de la Caridad, Sevilla |
El fondo del grupo lo conforma un bajorrelieve con el Monte Calvario, donde aún puede verse la escalera apoyada sobre la cruz de Cristo ya vacía, y a los otros dos condenados sobre sus cruces. Sobre una de ellas un operario sube por otra escalera y se dispone a bajar a uno de los ladrones. La escenografía teatral del conjunto crea la sensación de un espacio más profundo y dilatado, casi al punto de hacerlo parecer real. A ello no fue ajena la excelente policromía que aplicó el propio Valdés Leal.
Todas las esculturas destacan por la calidad del modelado y el sentido del volumen a través de los juegos de claroscuro, especialmente en el tratamiento de los ropajes. Roldán despliega en ellas una gran libertad de formas y, sobre todo, un dinamismo muy expresivo, que captamos no sólo en los escorzos, acusados e incluso forzados en algún momento, sino también en el tratamiento barbas y cabellos movidos por el viento, en los que se perciben las maneras del flamenco José de Arce. Por todo ello no son pocos los que no tienen duda en calificar este retablo como el mejor de todo el barroco español.
BIBLIOGRAFÍA:
- BERNALES BALLESTEROS, J., GARCÍA DE LA CONCHA, F. (1986): Imagineros andaluces de los Siglos de Oro. Barcelona: Editoriales Andaluzas Unidas
- FERNÁNDEZ MEDINA, I., Y OTROS (2007): "Retablo Mayor de la Iglesia del Hospital de la Caridad. Investigación e intervención". En PH Boletín del Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico, 62, pp. 20-43
- MARTÍN HERNÁNDEZ, F. (1981): Miguel de Mañara. Sevilla: Universidad de Sevilla